Como muchos padres ya sabreis los niños con discapacidad los atienden en Zaragoza el hospital san Juan de Dios.
Pero el problema es que para empastes o extraciones o tratamientos que necesiten que sean anestesiados principalmente porque no pueden colaborar los niños o son tratamientos largos o diferentes causas... pues en vez de realizarlo en Zaragoza los derivan a Barcelona porque no hay un equipo de anestesistas ni un quirofano que puedan utilizar.
¿Increible no? E injusto!!
Las familias tenemos que desplazarnos hasta Barcelona con niños que en muchas ocaiones van en silla de ruedas y con muchas dificultades. Pagar el viaje, alojamiento y manutención de nuestro bolsillo, y haciendo papeles puedes conseguir te devuelvan (por un acompañante solo padre o madre) una pequeñisima cantidad de lo gastado aportando justificantes.
SOLICITUD CREADA POR UN PADRE EN ESTA SITUACION:
Pero el problema es que para empastes o extraciones o tratamientos que necesiten que sean anestesiados principalmente porque no pueden colaborar los niños o son tratamientos largos o diferentes causas... pues en vez de realizarlo en Zaragoza los derivan a Barcelona porque no hay un equipo de anestesistas ni un quirofano que puedan utilizar.
¿Increible no? E injusto!!
Las familias tenemos que desplazarnos hasta Barcelona con niños que en muchas ocaiones van en silla de ruedas y con muchas dificultades. Pagar el viaje, alojamiento y manutención de nuestro bolsillo, y haciendo papeles puedes conseguir te devuelvan (por un acompañante solo padre o madre) una pequeñisima cantidad de lo gastado aportando justificantes.
SOLICITUD CREADA POR UN PADRE EN ESTA SITUACION:
Esta petición será entregada a:
Consejero de Sanidad del Gobierno de Aragon
Ricardo Olivan
a fecha de hoy hay 1.104 firmantes. Se necesitan 396 más
Instalar un quirófano de Salud Bucodental para Discapacitados para realizar intervenciones en Zaragoza.
Actualmente
las intervenciones se derivan a Barcelona con los retrasos de hasta 14
meses (Que yo sepa). Esto supone una DISCRMINACION respecto a los niños
que no padecen ninguna enfermedad que dificulte su colaboración en las
intervenciones odontológicas. En el caso de mi hija Daniela, ha estado más de un año, desde que le diagnosticaron la primera infección con
fístula en una muela, hasta que la intervinieron, con los dolores,
crisis epilépticas, y complicación de otras caries.
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